Tambien de hermosos atardeceres mientras saborea una Margarita en el sky bar de la Marina. ”Buscamos un contacto con el México real”, expresa Rafael Alcántar, Harbor Master de la Marina de La Cruz de Huanacaxtle, la más moderna del Pacífico mexicano con capacidad para 400 embarcaciones de 30 a 400 pies.
La Marina esta equipada con todos los servicios necesarios para una confortable estadía: baños y regaderas, seguridad, electricidad y carga de combustible..
Este moderno proyecto cuenta también con un club de yates, centro de negocios, sky bar, restaurante, mercado de mariscos, muelle y uno de los astilleros más equipados del país que, entre otras cosas, alberga la grúa más grande del Pacífico. Y con el espíritu de impulsar el crecimiento de la Riviera Nayarit, se ha desarrollado como parte de la Marina un proyecto que alberga espacios comerciales para las marcas más reconocidas del mercado, condominios y restaurantes.
Una zona abierta a la inversión para lo que se han destinado 132 mil metros sobre los que se construirán estos desarrollos.
Todo este encanto marino y pesquero no podría estar completo sin la dorada playa de La Cruz, que se extiende en cinco kilómetros divididos en cinco secciones: El Tizate, Cruz de Huanacaxtle, La Manzanilla, Piedra Blanca y Arena Blanca. Aquí encontrará, además de los placeres propios de la playa, diversos restaurantes donde podrá degustar de platillos preparados con pescado fresco del día, creaciones que se insertan en una tradición culinaria de más de cincuenta años.
Disfrute de actividades como snorqueleo, buceo y surf (en invierno las olas alcanzan altura suficiente para la práctica de este deporte), y por supuesto de la pesca, una de la principales actividades de La Cruz gracias a la abundancia de especies como el atún, marlin y dorado.
Imagine torneos de pesca a la luz de la luna llena, coloridas fiestas con el mar como otro invitado, o enclavar su yate en un pueblo que todavía huele a tradición. Todo esto y más lo espera en La Cruz de Huanacaxtle, en el “árbol que oye” deseando escuchar su voz.
